Los trastornos del habla son una patología relativamente frecuente en la infancia .Tienen una prevalencia cercana al 5-8% en preescolares y a un 4% en escolares; y su mayor importancia radica en el hecho que alteran la capacidad de comunicación del niño con sus padres y pares.
Los trastornos del habla se deben diferenciar bien de un trastorno del lenguaje ya que no son lo mismo.
Un trastorno del lenguaje es la incapacidad de comprender o de expresar una idea, pueden clasificarse en expresivas y comprensivas. En cambio un trastorno del habla se caracteriza por ser una articulación de las palabras o de su fluidez o ritmo.
Este último se subdivide en trastorno articulatorio, en donde se halla la dislalia que es un trastorno o alteración en la articulación de los fonemas o sonidos: bien sea porque se omiten, sustituyen, invierten o distorsionan los fonemas. En los trastornos del ritmo y la fluidez, tenemos el farfulleo que consiste en un habla precipitada, producto de la cual, no se entiende lo que el niño dice.
Estos trastornos podemos verlos en nuestra sociedad en forma constante, y muchas veces se le da poca importancia. Espero que los usuarios de este blog puedan ingresar al siguiente link http://www.uc.cl/medicina/medicinafamiliar/html/articulos/123.html para encontrar más información sobre el tema y ayudar a los niños que presentan esta dificultad.
Se despide Daniella Mella, estudiante de psicopedagogía.
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